AGROMG | Soluciones de Agronegocios

Ambiental

Soluciones industriales y de control de calidad para la industria agrícola y de alimentos.

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Soluciones industriales y de control de calidad para la industria agrícola y de alimentos.

Existe una necesidad creciente de desarrollar un método para el análisis de glifosato y otros compuestos polares relacionados sin derivatización. Recientemente, los Laboratorios de referencia de la UE (EURL) publicaron dos métodos que pueden analizar directamente el glifosato (GLY), su metabolito, el ácido aminometilfosfónico (AMPA) y el glufosinato (GLU) sin derivatización.

Contamos con un método LC/MS/MS de 12 minutos con una columna basada en amino para analizar el glifosato y otros compuestos polares relacionados en estados no derivatizados, con una selectividad y sensibilidad excepcionales.

GLIFOSATO

El glifosato (N-(fosfonometil)glicina), un compuesto organofosforado, se usa para matar malezas (por ejemplo, malezas anuales de hoja ancha y

pastos) que compiten con los cultivos. Desde su introducción al mercado hace aproximadamente 40 años, el glifosato se ha convertido en uno de los herbicidas más utilizados en el mundo debido a su toxicidad relativamente baja en comparación con otros herbicidas para los mamíferos.

La adopción del glifosato por parte de los agricultores se intensificó después de la introducción de cultivos modificados genéticamente “tolerantes al glifosato”, como el maíz y la soja, que pueden soportar el tratamiento con glifosato a diferencia de las malas hierbas que el herbicida pretende destruir. Al igual que otros pesticidas, el glifosato se administra directamente a los productos alimenticios y puede entrar en contacto tanto con los trabajadores de alimentos como con el medio ambiente, lo que genera una carga biológica de exposición en las poblaciones regionales no controladas. Como producto herbicida registrado bajo una serie de organizaciones reguladoras, el glifosato se ha considerado no tóxico con un riesgo mínimo para la salud humana con exposición persistente a niveles mínimos. Sin embargo, recientes evaluaciones de toxicidad realizadas por diferentes organizaciones han puesto al glifosato en el centro de una disputa. La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo clasificó como “probablemente cancerígeno para los humanos” en marzo de 20151

Sin embargo, en noviembre de 2015, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) publicó un informe en el que afirmaba que no había evidencia científica que relacionara el glifosato con el cáncer.